El Universidad de Burgos no acaba de arrancar en el campeonato liguero y ayer perdió de forma contundente ante el CV Albacete en tierras manchegas después de disputar un choque en el que el equipo que entrena José Miguel Pérez nunca tuvo opciones de hacer frete a un oponente que se mostró muy superior. El parcial que registró el último set, 25-8, deja muy claro qué equipo fue el gran dominador sobre la cancha.

La de ayer supone la sexta derrota consecutiva del conjunto castellano, ya que ha perdido los cuatro últimos partidos en el campeonato liguero (Hotel Cantur, Spar Tenerife, CV Sanse y CV Albacete) y los dos partidos ante el Bielsko-Biala en los dieciseisavos de final de la Copa CEV. El equipo sigue antepenúltimo en la clasificación y la próxima jornada se medirá en el polideportivo de El Plantío al Valeriano Alles Menorca, que cuenta con una victoria más en su casillero.

El choque dio poco de sí y es que sobre la cancha hubo un equipo que dominó. La igualdad fue la protagonista hasta mediado el primer set, aunque en la segunda mitad del parcial las de casa se impusieron de forma holgada. Tampoco encontró el camino preciso el Universidad de Burgos en la segunda manga, en la que como le ocurriera en el primer set nunca tuvo opciones de luchar por la victoria en el parcial y llevar el 1-1 al marcador. Con el 2-0 el choque parecía visto para sentencia, sobre todo por lo que había ofrecido uno y otro conjunto sobre la cancha de El Parque, aunque a la escuadra castellana aún le quedaba por pasar un duro trago, el último set.

El repaso al que se vio sometio el UBU fue apabullante y el equipo de José Miguel Pérez sólo pudo hacer 8 puntos. Lo mejor que le podía pasar a las de Burgos es que se acabara cuanto antes el partido y es que el equip visitante llegó a ir perdiendo por 19-0. No eran capaces de parar los ataques manchegos, mientras que en labores ofensivas no encontraba el camino. El 25-8 cayó como una losa sobre el conjunto burgalés, que debe enderezar su rumbo de forma inmediata si quiere conseguir el primero de los objetivos que se marcó en el inicio de la temporada: clasificarse para la fase final de la Copa de la Reina.