Tras tres victorias consecutivas, dos de ellas de mucho mérito ante Valeriano Allés y Haro Rioja, el Universidad de Burgos dio ayer la de arena ante el Nuchar Eurochamp Murillo. La escuadra burgalesa se vio superada en todas las facetas por las riojanas, que mostraron más cuajo en los momentos decisivos de los dos primeros sets. Una clara muestra de la superioridad del Murillo es que el UBU no estuvo ni un solo momento del partido por encima en el marcador.
Desde el inicio, desde el primer punto, se evidenciaron las carencias del Universidad de Burgos en la tarde de ayer. El 0-1 llegó con un error de Juliana Ribeiro en el saque, y el 0-2 con un bloqueo de Kenya Barros. Con Soraya Santos mermada, el remate no funcionó, las riojanas bloquearon con asiduidad y la defensa se vio sorprendida por la circulación de balón, con especial protagonismo para Vivianne Pessoa. Pronto el Nuchar Eucochamp Murillo comenzó a abrir distancias importantes (2-6) y José Miguel Pérez no esperó al tiempo técnico para parar el partido. De poco sirvió, ya que las riojanas se movieron en rentas de entre cuatro y seis puntos hasta que, tras el 8-14, reaccionó el Universidad de Burgos contra todo pronóstico. Logró un parcial de 6-1 y amenazó al Murillo (14-15), que apretó entonces para escaparse nuevamente (15-19). El set parecía visto para sentencia (20-23), pero dos errores de Arranz y Da Silva y un remate de Mireya Delgado pusieron emoción (23-23) a la recta final del parcial. La opción de remontada fue más virtual que real, y en su tercera oportunidad de cerrar el set la veterana Regla Bell no perdonó (25-27).
Estuvo más disputado, pese al tanteo final, el segundo set, en el que el Universidad de Burgos estuvo algo más entonado en recepción, pese a que, nuevamente, no se situó por delante ni una sola vez. También incrementó las opciones burgalesas que el Murillo cometió algunos errores iniciales en el saque y que Sara Hernñandez encontró con más facilidad a Juliana Ribeiro una vez que se demostró que Soraya Santos no estaba en condiciones de luchar ante uno de los equipos más potentes de la Superliga. Pese a todo, el Nuchar Eurochamp Murillo dio la sensación en todo momento de controlar la situación, de estirar la goma a su antojo (6-9, 10-13).
José Miguel Pérez vio que el duelo se le escapaba tras el segundo tiempo técnico (15-16). Solicitó un tiempo muerto (15-18), pero se acabó dando por vencido y, en vista de que su equipo era incapaz de cambiar el rumbo del encuentro (16-19, 18-22) retiró a Soraya Santos para evitar una lesión y un sobreesfuerzo innecesario. El parcial cayó del bando visitante después de que Carlos Arratia frenara una semireacción burgalesa (del 20-24 al 22-24). Da Silva bloqueó y sentenció (22-25). Del tercer y último set pocas cosas se pueden decir. Se jugó, pero no existió. Carlos Arratia dio entrada a Rocío Gómez por Mar Arranz y José Miguel Pérez mantuvo a Paula Pérez en la pista. Poco después, ya con 1-8, sentó a Mireya Delgado para que jugara Alba Sánchez y acabó dando minutos de calidad a Danira Costa (4-16). El resultado apuntaba a escandaloso, pero la aparición de la relajación, lógica ante la facilidad encontrada por parte del Murillo permitió al Universidad de Burgos maquillar y alcanzar, al menos, la decena de puntos. El duelo, pese a todo, se cerró como se abrió, con un nuevo error burgalés en el saque, en esta ocasión de una pagada Regi Miloserdova (10-25).
La derrota aleja al Universidad de Burgos de los dos primeros clasificados y baja de golpe al equipo burgalés de la nube, además de hacerle perder la tercera posición en favor de Haro.
Diario de Burgos