El Universidad de Burgos dijo adiós a la Copa de la Reina al caer (0-3) ante el CAV Murcia. El mejor juego ofensivo de las murcianas se impuso desde el primer momento y las burgalesas fueron superadas en casi todas las facetas del juego, lo que las dejó fuera de la final. El ataque del equipo de José Miguel Pérez no pudo superar el bloqueo rival, mientras que en defensa las universitarias tuvieron muchísimos problemas. Eso les hizo perder un encuentro que pudo cambiar por completo si en el primer parcial, tras una gran remontada, el UBU hubiera aprovechado alguna de las dos bolas de set de que dispuso.
El primer set comenzó con claro dominio murciano. Las burgalesas no encontraban la fórmula de romper ese fulgurante inicio, por lo que un 2-6 en el marcador obligó al técnico José Miguel Pérez a pedir el primer tiempo muerto del encuentro. El CAV Murcia estaba mejor y siguió anotando con facilidad en los primeros compases de la semifinal (4-8).
En la continuación, un parcial de 0-4 parecía romper el set a favor de las murcianas (6-13). El Universidad de Burgos buscó la reacción y, por momentos, se acercó en el marcador gracias a la mejora en su juego ofensivo. Aún así, el Murcia llegó al segundo tiempo técnico con ventaja (12-16).
Pero las burgalesas no se iban a dar por vencidas tan pronto. Mejoraron en el juego defensivo y continuaron con un par de buenos ataques que las metieron de lleno en el set, obligando al entrenador murciano a solicitar tiempo muerto, ya que el marcador reflejaba un 16-17 tras un sensacional parcial de 3-0 a favor de las universitarias. La reacción continuó y el UBU se puso por delante en el marcador, por primera vez, con el 19-18. Eran los mejores minutos de las universitarias, que con un juego agresivo estaban desplazando al gran favorito y vigente campeón, Murcia.
Siguieron a este parcial para las burgalesas un intercambio de puntos antes de los juegos definitivos del primer set. Un error en el saque de Alba María Sánchez puso al Murcia con 20-22, ante lo que el UBU reaccionó con un nuevo parcial de 4-0 (24-22) que permitió a las castellanas disponer de dos pelotas para cerrar el set, dos bolas que no supo aprovechar. Y como perdonó, lo acabó pagando con la pérdida del primer set y, posiblemente, del partido por el golpe psicológico consecuente.
La pérdida del primer parcial afectó en el inicio del segundo, que comenzó con claro color murciano (0-3). Mireya Delgado, a la que Michelle Moriarty buscó con asiduidad en ataque, no encontró la manera de superar el bloqueo murciano y la diferencia en el marcador cada vez fue a más, llegando al tiempo técnico con un contundente 2-8 que dejaba a las burgalesas bastante tocadas.
El intercambio de puntos que se produjo mediado el segundo set no benefició al UBU, que seguía por debajo en el marcador. La desventaja burgalesa rondaba los cuatro puntos y los problemas en ataque continuaban, si bien la defensa parecía funcionar algo mejor, lo que permitió a las burgalesas reducir las diferencias (12-14). Fue entonces cuando otro arreón murciano dejó el marcador en 12-16, evitando que el UBU tuviera opciones reales en el set.
El UBU se mostraba incapaz de acortar distancias ante su verdugo en la final de Monforte de Lemos 2010, ya que el contundente ataque murciano estaba decantando el set a su favor. José Miguel Pérez buscó la reacción con la petición de tiempo muerto, pero sus jugadoras seguían siendo superadas por las rivales (15-20), reforzadas en los últimos días con Patricia Aranda (ex UBU) y Milagros Collar. Plagado de recursos ante un UBU sin Sara González, en la recta final el Murcia amplió su renta y cerraron el set (16-25).
Al Universidad de Burgos, con dos sets en contra, no le quedaba otra que apelar a la épica, olvidando lo sucedido en las dos mangas anteriores. Las opciones de llegar a la final se esfumaban, por lo que debían jugarse el todo por el todo.
Y en la tercera manga por primera vez comenzaron por delan