Valora el UBU su clasificación para disputar su torneo preferido, la Copa de la Reina (ya tenía el billete tras la derrota del Palma). Se ha demostrado el equipo verdinegro que es capaz de combatir hasta el último punto a pesar de los problemas acumulados, aunque, también es consciente de que está lejos de alcanzar su mejor nivel lastrado por las circunstancias.
Por cuarta vez en 11 jornadas, el conjunto castellano llegó al quinto set de un partido. En esta ocasión, lo hizo en la cancha del Tenerife, otrora dominador de la categoría, con un resultado ya familiar. La de ayer es la tercera derrota consecutiva de las de El Plantío, el mismo número de tropiezos que acumulan las de José Miguel Pérez en choques decididos en la muerte súbita. Un dato que en la clasificación otorga a las locales un amplio margen de mejora pero que, sin embargo, escuece en la moral de un equipo generoso en el esfuerzo al que no le acompañan los resultados.
El parcial se mantuvo igualado hasta el final, en el que las locales llegaron a levantar hasta cinco balones de set hasta disponer de una oportunidad que no supo aprovechar (30-29). Las de José Miguel Pérez se rehicieron y aprovecharon su siguiente ball-set para anotarse el set con un remate de Miloserdova.
El Fígaro comenzó mejor la segunda manga (8-4, 16-14) después de ajustar el rendimiento en defensa. Pero entonces apareció Soraya Santos, la mejor sin duda de su equipo, para liderar a las suyas y ponerlas por delante en el electrónico (18-22). Las locales no se rindieron (22-23), pero acabaron cediendo de nuevo ante la defensa de su rival.
En el tercer set, Juan Antonio Armas apostó por Patricia Suárez y, tras un comienzo igualado (7-8), llegó al segundo tiempo técnico con una ventaja (16-13) que mantendría hasta el final del set sin demasiados apuros.
La siguiente manga resultó igualadísima (7-8), aunque las visitantes parecieron tomar ventaja gracias a los remates de Soraya y Mireya (13-18) Sin embargo, Sara Hernández repartió bien el juego entre todas sus atacantes para endosar un parcial de 4-0 (17-18) y el juego colectivo del Fígaro permitió anotarse el set y forzar el desempate.
Después de dos partidos consecutivos cayendo en la muerte súbita, el equipo local no las tenía todas consigo. El Universidad de Burgos comenzó bien (2-5), pero, una vez más, Regla Bell, que alcanzó los 33 puntos en ataque, tomó las riendas para igualar el partido (5-5). Las blanquiazules mejoraron su efectividad para tomar ventaja (11-8) y terminar cerrando el tie-break para hacerse con dos puntos en un partido marcado por la igualdad.
El Correo de Burgos